Este hotel es una verdadera joya escondida. Desde el momento en que llegamos, nos recibieron con una calidez y amabilidad excepcionales. La atención al detalle en cada rincón de este lugar fue sorprendente. Las habitaciones estaban impecables y decoradas con hermosos muebles antiguos franceses que le daban un toque encantador. Además, el desayuno era simplemente delicioso, con una variedad de opciones dulces y saladas, incluyendo productos locales. Sin duda alguna, una experiencia que valió cada euro.

Nada que mejorar, todo estuvo perfecto.

La habitación era enorme y magnífica tenía una cama super cómoda y un secador de pelo, un gorro de ducha y toallas de baño en el baño. Nos ha gustado mogollón la vista al patio del hotel. Ubicación céntrica justo al lado del centro de la ciudad y también del hermoso jardín, ambiente tranquilo.

Ubicación ideal, este lugar se encuentra justo al lado del centro de la ciudad 🏞️ y de un hermoso jardín.

La habitación era enorme, ofrecía cosas útiles, como un horno de microondas y una cafetera/tetera.

Me encantó la casa maravillosa y acogedora, cuidada al detalle. El trato personal y cálido de los propietarios fue excepcional. La habitación renovada y con buen wifi. El desayuno delicioso y variado con producto local. La decoración de la villa es de revista de decoración. El jardín interior es un remanso de paz y las vistas a los Pirineos son impresionantes. Los propietarios son encantadores y hablan un poco de español, lo cual es de agradecer.

Mejor imposible.

Me ha gustado mogollón este hotel. Pasé 2 noches tranquilas aquí. La habitación que nos dieron tenía un horno de microondas, una plancha y tabla de planchar, un hervidor eléctrico. La ubicación del lugar era céntrica. Me encantó este hotel, estuve dos noches aquí muy tranquilas. La habitación incluía comodidades como un horno de microondas, una plancha y tabla de planchar, y un hervidor eléctrico. Su ubicación en el centro fue muy conveniente para nosotros.

La casa es hermosa, acogedora y cuidada al detalle. El salón comedor es muy elegante y el jardín interior es un remanso de paz. Las habitaciones están impecables, con camas amplias y cómodas. Los propietarios son encantadores y atentos, incluso hablan un poco de español. El desayuno es completo y delicioso.

No.